El agua en los pulmones, conocida científicamente como edema pulmonar, ocurre cuando los pulmones están llenos de líquido, impidiendo la entrada de oxígeno y la salida de dióxido de carbono.
En general, la acumulación de líquido en el pulmón ocurre cuando se tiene un problema en el sistema cardiovascular, como la insuficiencia cardíaca, pero también puede surgir cuando hay una lesión en el pulmón, como infecciones o exposición a toxinas, por ejemplo.
1. Problemas cardiovasculares
Cuando las enfermedades del sistema cardiovascular no son tratadas de forma adecuada, pueden provocar un aumento excesivo de la presión dentro del corazón, impidiendo que la sangre sea bombeada correctamente.
Cuando esto sucede, la sangre se acumula alrededor de los pulmones y aumenta la presión dentro de los vasos en esa región, haciendo que el líquido, que es parte de la sangre, ya sea empujado hacia el interior de los pulmones, ocupando un espacio que debía estar solo relleno de aire. Esto se conoce popularmente como tener agua en los pulmones.
Algunas de las enfermedades cardiovasculares que más comúnmente provocan este cambio incluyen:
- Enfermedad coronaria: esta enfermedad causa el estrechamiento de las arterias del corazón; lo que debilita el músculo cardíaco, disminuyendo la capacidad para bombear sangre.
- Cardiomiopatía: en este problema el músculo cardíaco se debilita sin tener una causa relacionada con el flujo de sangre, como en el caso de la enfermedad coronaria.
- Problemas en las válvulas del corazón: cuando las válvulas no puede cerrar completamente o abrir adecuadamente, la fuerza del corazón puede empujar la sangre en exceso a los pulmones.
- Presión alta: esta enfermedad dificulta el funcionamiento del corazón que necesita hacer mucha fuerza para bombear la sangre. A lo largo del tiempo, el corazón puede perder la fuerza necesaria, lo que conduce a la acumulación de sangre en los pulmones.
Además, otras condiciones, como problemas renales, también pueden aumentar la presión arterial y dificultar el trabajo del corazón, lo que lleva a un caso de edema pulmonar, cuando no son tratadas adecuadamente.

Edema pulmonar o agua en los pulmones
2. Las infecciones pulmonares
Algunas infecciones pulmonares causadas por virus, como el de la primera semana o el virus del Dengue, pueden causar cambios en las presiones de los vasos sanguíneos de los pulmones, provocando la acumulación de líquido.
3. La exposición a toxinas o humo
Cuando se produce la respiración de toxinas, como el amoníaco o cloro, o de humo de cigarrillo, por ejemplo, los tejidos del pulmón pueden irritarse e inflamarse, produciendo líquido que ocupa el espacio dentro de los pulmones.
Además, cuando la inflamación es muy severa, pueden producirse lesiones en los pulmones y en los pequeños vasos sanguíneos, lo que permite la entrada de líquido.
4. Ahogamiento
En situaciones de casi ahogamiento, los pulmones se llenan de agua que es aspirada por la nariz o la boca, acumulándose en el interior de los pulmones. En estos casos, aunque el agua en los pulmones sea eliminada con las maniobras de rescate, el edema pulmonar puede mantenerse, pudiendo ser necesario el traslado a un hospital.
5. Grandes altitudes
Personas que hacen montañismo o escalada presentan un mayor riesgo de desarrollar edema pulmonar, ya que cuando se está en altitudes superiores a 2400 metros, los vasos sanguíneos sufren un aumento de la presión. Este aumento de presión puede provocar la entrada de líquido a los pulmones, denominada popularmente agua en los pulmones especialmente en los principiantes de este tipo de deportes.
Este artículo 5 causas principales de agua en los pulmones o edema pulmonar es contenido del blog Enfermedad y salud.